Ruta
Esta semana nuestra aventura comienza en la población de "Beceite". Al estar un poco lejos de casa decidimos pasar un par de días en esta población, en uno de sus muchos alojamientos. Descubrimos que hay varias rutas que se pueden hacer desde aquí, pero nuestro objetivo era hacer la "Ruta" mas clásica, el "Parrizal", así de esta manera tenemos otra escusa para volver a esta maravillosa zona. Para llegar al inicio de esta aventura, solo tenemos que seguir los carteles indicativos, que nos llevaran a cruzar todo el pueblo. Después de unas cuantas curvas, unos 4km, llegamos al punto de control. Aquí es donde tenemos que pagar, si nos alojamos en el pueblo son 2€ por coche, si no son 8€. Los chicos muy amables te dan un mapa de la zona y te indican el camino. Después de un par de kilómetros llegamos al gran parking. Después de hacer los estiramientos habituales, nos acercamos a un pequeño puente que hay antes del parking, para empezar a disfrutar de este bonito barranco.
Volvemos hasta el parking el cual cruzamos y nos acercamos hasta los paneles informativos, donde una de las primeras cosas que nos dice es que esta "prohibido el baño", aparte de hacer fuego etc... Seguimos por la pista de tierra y disfrutando del entorno, empezamos a oír el rumor del agua a nuestra derecha. Pasaremos por un primer "Portal", y justo a la entrada del segundo, vemos un cartel que nos indica la dirección hacia las "Pinturas Rupestres la Fenellasa". Es un corto camino de ida y vuelta cruzando el río por un divertido "Puente".
Volvemos de nuevo a la pista, pasamos por el portal y en unos cuantos metros pasamos por la "Cova de la Dona". El acceso es por nuestra izquierda, un lugar algo inquietante y mágico. Hoy no es el día para explorar así que descartamos subir por la pequeña senda que da ha esta "Cueva".
Un poco más y llegamos por fin al "Pla de la Mina". Aquí aún se pueden observar las antiguas instalaciones de una antigua "Mina". Desde aquí comienza la senda por el río hacia Los "Estrechos". Hay bancos y mesas, y puede ser un buen lugar para comer algo, y reponer fuerzas para lo que nos queda por recorrer. vemos la primera "Pasarela" de madera que nos permite avanzar sin mojarnos. Existen varias de estas, la gran mayoría muy fáciles de cruzar. Hay ocasiones que tenemos que cruzar el "Río" sin ellas, pero solo hay riesgo de mojarte.
Para seguir por el camino correcto solo tenemos que buscar las "Balizas" de madera pintadas con una ralla "Verde". Después de cruzar el río en varias ocasiones la senda se desvía un poco del río y nos metemos en un frondoso bosque. Pasaremos por dentro de una cueva y tendremos que cruzar un divertido "Puente Tibetano".
Las paredes del cañón van adquiriendo cada vez más altura y verticalidad, formándose a veces espectaculares agujas. Son las famosas "Gubies". El río desaparece ahora bajo un gran caos de bloques de piedras que nos obligan a tomar alguna precaución. Después de un buen tramo llegamos hasta los "Estrechos", unas paredes de mas de 100m de altura, dejando apenas una grieta de unos 20 metros de ancha. El río crea una gran badina que pondrá fin a nuestra incursión por el río "Matarraña".
Desde aquí solo nos queda deshacer lo andando, lo que nos da la oportunidad de volver a disfrutar de este precioso paraje, descubriendo pequeños rincones que antes no habíamos visto. Después de mas o menos 1,15 horas, llegamos de nuevo hasta el coche, dando fin a una bonita aventura por los alrededores de "Beceite".